El Toro de Barro

El Toro de Barro

lunes, 30 de enero de 2012

«Amanda», de Verónica Pedemonte...







Verónica Pedemonte

Amanda




Te recuerdo, Amanda, venías con él.
Tenías cicatrices en el cuello y sonreías.
Marisa cantaba canciones criollas.
Pasó un tiempo muy largo
el tiempo que tarda en crecer un petirrojo,
el tiempo que media entre dos navidades.
El tiempo suficiente de la huida.
Dejaron de caberme los zapatos
aquel vestido blanco le sirvió a la muñeca.
Te recuerdo Amanda, era mi cumpleaños.
Trajiste una cesta de chicles de frutilla.
Tenías en la cintura cicatrices.
Yo las vi mientras el chicle de frutilla
se deshizo de placer en mi boca.
Era la época de las lluvias torrenciales.
Los niños sonreíamos por no ir a la escuela.
Por eso, no me di cuenta, Amanda,
que el agua de tu cara no era lluvia.
 


De su libro
Esclavos y libertos


Otros poemas de
Verónica Pedemonte
«Amanda»
«Muerde»
«Pumas»


Grandes Obras de 
El Toro de Barro
Neus Aguado, "Intimidad de la fiebre”, Col. «La piedra que habla», Ed. El Toro de Barro, Carlos Morales ed., Tarancón de Cuenca, 2005, PVP 10 euros. edicioneseltorodebarro@yahoo.es
Neus Aguado, "Intimidad de la fiebre”
Col. «La piedra que habla»
Ed. El Toro de Barro, Carlos Morales ed.
Tarancón de Cuenca, 2005
PVP 10 euros.
Neus Aguado, "Intimidad de la fiebre”, Col. «La piedra que habla», Ed. El Toro de Barro, Carlos Morales ed., Tarancón de Cuenca, 2005, PVP 10 euros. edicioneseltorodebarro@yahoo.es


 










 










2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es un poema precioso, por fin leo algo de Verónica, delicioso y ancho como la mejor poesía ¿americana? No estoy seguro de si Verónia es americana, pero lo parece.

César Cortijo

Emilio Porta dijo...

Verónica Pedemonte es una extraordinaria poeta, una magnífica escritora. Sabe cómo escribir y de què escribir. Su temática siempre es una avanzadilla hacía la cultura y la sensibilidad que deben abrigar a toda obra literaria. Es una gran compañera en la red literaria y portal de contenidos Netwriters y, cada vez que encuentro una entrada suya, mi mente y mi alma se abren más a la vida. Gracias por darnos este poema. Y gracias también por alojarlo aquí. Es, sin duda, un gran post.